Un grupo de investigadores ha puesto en marcha un banco de datos genómicos para mapear por qué ciertos perros están genéticamente predispuestos al cáncer y aplicar estos descubrimientos a los humanos

La oncología comparativa investiga el cáncer en perros con la intención de aplicar estos descubrimientos en humanos. 

La Facultad de Veterinaria de la UC Davis ha lanzado un Atlas del Genoma Tumoral Canino, el primer banco de datos genómicos de este tipo fuera del desarrollado por el Instituto Nacional del Cáncer. Se trata de un recurso que puede almacenar cientos de muestras genéticas de perros de compañía diagnosticados con distintos tipos de cáncer, como osteosarcomas, melanomas orales y gliomas.

Estos tres cánceres son notablemente similares a los mismos cánceres que se encuentran en los humanos y pueden ser fatales en ambas especies. A través de la oncología comparativa, los científicos buscan encontrar curas que funcionen en los perros con la esperanza de que terapias similares puedan funcionar en las personas. De hecho, se están realizando ensayos clínicos caninos en UC Davis para probar un agente de inmunoterapia para combatir el cáncer.

Como parte de su investigación conjunta sobre el cáncer con la Facultad de Veterinaria, el Centro Integral de Cáncer de UC Davis está construyendo un extenso catálogo de genomas para mapear por qué ciertos perros están genéticamente predispuestos al cáncer.

John McPherson, subdirector del centro oncológico, y Christine Toedebusch, profesora asistente de ciencias quirúrgicas y radiológicas en la facultad de veterinaria de UC Davis, lideran la iniciativa de investigación.

El Atlas del genoma tumoral canino albergará una colección de muestras biológicas que contienen mutaciones y alteraciones en las expresiones génicas tumorales. El atlas permitirá a los investigadores extraer los datos después de analizar y secuenciar la composición genética de los tumores.

“Un genoma es como una enciclopedia. Cada tomo de la enciclopedia es un cromosoma y dentro de cada tomo hay capítulos y párrafos. Secuenciar es leer las palabras y letras del genoma. Como investigador en genómica, estoy buscando palabras mal escritas. Estos son cambios que alteran la función de las proteínas codificadas por los genes”, explica McPherson.

Este enfoque de investigación, que se llama oncogenética, se basará en el atlas para, añade, identificar variantes genéticas, y luego rastreará esos patrones para ver si se pueden asignar a ciertos tipos de cáncer.

LAS SIMILITUDES ENTRE LOS CÁNCERES HUMANOS Y CANINOS
Por su parte, Toedebusch, explica que los perros comparten complejidad genética y ambiental con los humanos y tienen un sistema inmunológico intacto, a diferencia de los ratones de laboratorio.

“Muchos tumores caninos progresan de manera similar y comparten muchas características con los tumores humanos. Si bien los ratones de laboratorio son vitales para comprender y probar inicialmente los mecanismos de progresión del cáncer, han demostrado repetidamente un éxito limitado en la traducción terapéutica a pacientes humanos con cáncer. El cáncer canino de origen natural puede servir como puente para la traducción terapéutica entre roedores y humanos”, insiste.

Por ejemplo, Toedebusch menciona los gliomas, tumores cerebrales fatales en perros y humanos, que causan la muerte de los pacientes entre un año y 18 meses después del diagnóstico.

“Han pasado más de 20 años desde que una nueva terapia ha sido efectiva para extender este escaso tiempo de supervivencia en humanos”, lamenta la investigadora que afirma que los perros se están volviendo mejores modelos traslacionales para el glioma humano, creando oportunidades de financiación para estudiar la enfermedad canina y permitiendo la posibilidad de avances en el tratamiento de caninos y humanos por igual.

LOS AVANCES EN EL TRATAMIENTO DEL CÁNCER EN MASCOTAS
Este atlas es una muestra más del auge de la oncología comparada, que va en paralelo con los avances en el tratamiento del cáncer en animales de compañía, que también ha mejorado ampliamente en los últimos años.

Esto se ha conseguido, en parte, debido a que los propietarios están cada vez más dispuestos a invertir recursos en la salud de sus mascotas y reclaman que se les atienda de la mejor manera posible.

En este contexto, Hill’s Pet Nutrition ha desarrollado el alimento seco Prescription Diet On-Care, para proporcionar un apoyo nutricional para mascotas que viven con una enfermedad grave, como el cáncer.

Es una fórmula que se ha conseguido tras cinco años de investigación y desarrollo para obtener un apoyo nutricional para estos pacientes que ofrece una alta densidad calórica, y ayuda a garantizar que se satisfagan sus necesidades nutricionales.

Como no podía ser de otra manera, en el ámbito farmacológico también se están produciendo grandes avances. Así, compañías como Chemovet ofrecen a los profesionales clínicos cada vez más opciones de tratamiento, facilitando que tengan acceso a más medicamentos diseñados específicamente para animales y ampliando su línea Oncovet.

De hecho, están trabajando para que, próximamente, estén disponibles en el mercado veterinario nuevos medicamentos como Oncovet H (hidroxiurea), Oncovet M (mitotano), Oncovet MF (melfalán), Oncovet STR (satraplatino), Oncovet TR (trametinib) y algunos más aún en desarrollo.