Expertos publicaron en la revista The Lancet una carta en la que rechazan que haya habido intervención humana en el origen de la pandemia
“El SARS-CoV-2 más probablemente se originó en la naturaleza y no en un laboratorio”, dijeron los científicos.shutterstock
En una carta publicada en The Lancet, un grupo de científicos afirma que no hay evidencia científica que respalde la teoría que sugiere que el coronavirus salió de un laboratorio en China y que otras investigaciones aseguran que “el virus evolucionó en la naturaleza”.
El grupo de científicos que escribió el artículo es el mismo que en febrero 2020 descartó la idea de una fuga del virus de algún laboratorio por ser una teoría de conspiración.
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“El SARS-CoV-2 más probablemente se originó en la naturaleza y no en un laboratorio, sobre la base de recientes análisis genéticos del nuevo virus y evidencia bien establecida de enfermedades infecciones emergentes anteriores, incluyendo los coronavirus que causan el resfriado común, así como el SARS-Cov y MERS-Cov originales”, explicó el comunicado.
Los autores destacan que la importancia de encontrar el verdadero origen del virus recae en que “el mundo” pueda prepararse para futuras pandemias y, en especial, para esclarecer “con urgencia” la hoja de ruta necesaria para impedirlas.
El laboratorio de Wuhan en China es el centro de especulaciones en torno al origen del virus
“Creemos fuertemente en la nueva evidencia, creíble y revisada por pares en el ámbito científico de que el virus evolucionó en la naturaleza, mientras que las sugerencias de una fuente de fuga de laboratorio (…) permanecen sin evidencia científicamente valida que la ubique en revistas científicas respaldadas por pares especialistas”, señaló.
El informe hace hincapié en que la “ciencia, no la especulación, es esencial para determinar cómo el SARS-Cov-2 llegó a los humanos”.
“Alegatos y conjeturas no son de ayuda, ya que no facilitan el acceso a la información y la evaluación objetiva del murciélago como vía del virus a un patógeno humano, que podría ayudar a prevenir una pandemia futura”, advierte el reporte, que asegura que la “transparencia y la cooperación entre científicos” proporcionan un sistema de alerta temprana esencial para evitar nuevas pandemias.
En declaraciones publicadas el año pasado, el mismo grupo de científicos condenó “las teorías conspirativas que sugieren que el Covid-19 no tiene un origen natural”.
El Instituto de Virología de Wuhan estuvo en el centro de la polémica tras la aparición del SARS-CoV-2.
Además, apoyaron a los expertos chinos tras las críticas. “Queremos que ustedes, los científicos y profesionales de salud de China, sepan que estamos con ustedes en su lucha contra este virus”, mencionaron.
LA NACION