Estudian ocho casos de niños en Argentina que podrían tener hepatitis severa de origen desconocido.
Al menos ocho niños están siendo estudiados en diferentes puntos del país ya que podrían tener hepatitis graves. Así lo confirmó en las últimas horas el Ministerio de Salud de la Nación, que además informó que esos casos están en investigación epidemiológica y aún no han sido clasificados como hepatitis graves de origen desconocido.
Uno de estos ocho casos es el del nene de 8 años que está internado en Rosario por una falla hepática grave, por la cual el equipo del Sanatorio de Niños de Rosario que lo está atendiendo decidió inscribir al paciente en la lista del Incucai para que habiliten el trasplante de hígado, ya que no queda otra alternativa para mejorar su salud.
Al no mostrar signos de recuperación, en las últimas horas, los especialistas de la Unidad de Hígado y Trasplante Hepático del Sanatorio de Niños (único centro autorizado para este tipo de intervenciones en esta zona) decidieron que el tratamiento adecuado es el trasplante y que debe hacerse lo más rápido posible.
Por su parte, desde la cartera sanitaria de la Nación comentaron que se trata de casos aislados y sin conexión alguna entre sí, al mismo tiempo que enfatizaron que “no se trata de un brote sino de una situación que no escapa a lo que se notifica en forma habitual”, ya que todos los años se registran casos con cuadros similares de hepatitis agudas graves sin diagnóstico.
Igualmente, el Ministerio, ante la alerta epidemiológica que se produjo en otros países del mundo y que también se emitió en nuestro país el pasado 27 de abril, recomienda a la población controlar y completar los esquemas del Calendario Nacional de Vacunación para cada edad, realizar higiene frecuente de manos, evitar el contacto con personas enfermas, cubrirse al toser o estornudar y evitar tocarse ojos, nariz y boca.
Ante la presencia en menores de 16 años de síntomas compatibles con los de la hepatitis (fiebre, fatiga, pérdida del apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina oscura, heces blancas, dolor articular e ictericia) se aconseja consultar al médico.
>> Leer más: El niño de 8 años internado con una hepatitis aguda va a trasplante
Además, la cartera sanitaria recomendó a los equipos de salud encargados de atender a la población pediátrica sospechar hepatitis aguda de origen desconocido en aquellos casos con clínica compatible de hepatitis con pruebas negativas para hepatitis virales (A, B, C, D y E), e incluir en el estudio de estos pacientes la detección de adenovirus.
Debido a estos casos de los últimos días, se conformó un grupo de trabajo integrado por distintas áreas del Ministerio de Salud de la Nación, como la Dirección de Epidemiologia, la Dirección de Salud Perinatal y Niñez, la Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles, el Programa de Control de Hepatitis Virales, la Coordinación de Salud Ambiental y el Laboratorio Nacional de Referencia de Hepatitis Virales y de Gastroenteritis Virales (INEI-ANLIS).
A ellos se sumarán también representantes del Hospital Garrahan y sociedades científicas. Además de analizar la situación epidemiológica, el equipo tendrá a cargo la tarea de generar una guía de recomendaciones para el abordaje integral de las hepatitis graves de origen desconocido y establecer mecanismos de difusión de la información.
También se solicitarán muestras de cada uno de los casos sospechosos para realizar estudios complementarios en el Laboratorio Nacional de Referencia de Hepatitis Virales.
La hepatitis es la inflamación del hígado que puede ser de causa infecciosa, tóxica o autoinmune. En la mayoría de los casos, la hepatitis es provocada por un virus. Las hepatitis virales son causadas más frecuentemente por los virus de hepatitis A, B y C. El test para las hepatitis B y C permite iniciar un tratamiento oportuno y minimizar la transmisión. Las hepatitis A y B son prevenibles a través de vacunas. Los tratamientos para la hepatitis B crónica y la hepatitis C, son seguros y altamente efectivos.