Al menos cinco futbolistas franceses presentarían síntomas compatibles con este virus, que genera cuadros graves
Alejandro Horvat
Al Mundial de fútbol, que se está disputando en Qatar, se le sumó un problema inesperado: el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS, por sus siglas en inglés), o más coloquialmente conocido como “fiebre del camello”. Esta afección encendió las alarmas cuando trascendió la posibilidad, que aún no fue confirmada ni descartada por la FIFA, de que, al menos, cinco jugadores del seleccionado francés se habrían contagiado con el virus. Si bien medios de ese país indicaron que los deportistas lo contrajeron, a los expertos argentinos consultados por la nacion les llamó la atención que hasta ayer no se hubiese emitido un comunicado oficial al respecto por parte de algún organismo de salud.
Según los expertos, el MERS, sobre todo, se transmite del camello al ser humano. Sin embargo, indicaron que hay algunos pocos casos reportados de transmisión interhumana. Por eso, su potencial pandémico es acotado, pero su letalidad, que ronda el 30%, es significativamente más alta que la del Covid-19. En cuanto a los síntomas, son muy similares a los de la gripe A o B, es decir, fiebre, tos, y dolor corporal, entre otros.
Un dato que podría complejizar el panorama es que, en paralelo al Mundial, en Qatar se realiza el festival de concursos de belleza de camellos, organizado por el Camel Mzayen Club.
“En Qatar se están llevando a cabo esos dos eventos masivos en simultáneo, que han atraído a cientos de miles de personas de Oriente Medio y de todo el mundo. Muchos asisten a ambos eventos, interactuando estrechamente entre ellos y con los camellos, creando las condiciones ideales para la transmisión de patógenos zoonóticos asociados a los camellos. Estos patógenos incluyen el altamente letal MERSCOV”, publicó la prestigiosa revista The Lancet el martes pasado.
Lautaro de Vedia, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), explicó que la también llamada “gripe del camello” es un tipo de coronavirus. “En cuanto a los distintos tipos de coronavirus, en 2001 apareció el síndrome respiratorio agudo grave (SARS) y se reportaron casos en varios países, como Estados Unidos y Canadá. Mientras que la pandemia de 2020 se generó por el SARS-COV2. En tanto, el MERS apareció en 2013, pero fue acotado su alcance. Se vieron casos, sobre todo, en Egipto y Arabia Saudita. Lo llamativo es que las muertes reportadas fueron altas, de alrededor del 30% de los infectados, aunque no contamos con los datos para saber las circunstancias de los fallecidos”, señaló De Vedia.
El especialista agregó que, una vez finalizado en Mundial, los médicos deberán estar atentos a los cuadros, en apariencia gripales, de aquellos que hayan viajado.
Jorge Geffner, miembro del Departamento de Microbiología, Parasitología e Inmunología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires e investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), explicó que el virus se puede transmitir por vía aérea o a través de la leche o la carne del camello. Para él, si se confirma que los jugadores franceses tienen un cuadro de MERS, sería un dato alarmante. Por eso, le pareció extraño que hasta ayer no se emitiera un comunicado oficial respecto del tema, en el que se afirme o niegue que los jugadores tengan la enfermedad.
“La transmisión del virus es del camello a las personas o por ingesta de leche de camello o carne de camello, aunque lo que más se consume son los productos lácteos. Ninguno de los casos tiene diagnóstico confirmado de MERS, por eso creo que se debe tratar de otro virus”, indicó Geffner.
El especialista resaltó que el virus tiene dos características importantes: “No tiene un gran potencial pandémico porque se transmite, sobre todo, del animal al humano. Sin embargo, lo que preocupa es el alto nivel de gravedad de la infección. Por eso, si se confirmaran los casos, sería una noticia importante”.
Recomendación
Elena Obieta, miembro de la SADI, describió que los síntomas del MERS son dolor de garganta, tos, fiebre, y “rápidamente” puede avanzar hacia otras complicaciones respiratorias.
“Desde 2013 hasta la fecha se reportaron cerca de 2100 casos, que casi siempre estuvieron limitados a Medio Oriente. No hay un tratamiento específico para tratarlo y no hay una vacuna disponible”, expuso la especialista. Y subrayó que, si bien por el momento no tiene potencial pandémico, el MERS, como sucedió con el Covid-19, podría mutar, aunque resaltó que no hay registros de que esté sucediendo. Por último, lo que les sugirió a los argentinos que se encuentran en Qatar es sencillo: “No se acerquen a los camellos”. .
Tal como informó el medio francés L’équipe, los primeros futbolistas que presentaron síntomas fueron Dayot Upamecano, Adrien Rabiot y Kingsley Coman. Los dos primeros se perdieron el partido que se disputó el miércoles ante Marruecos por las semifinales. Mientras que Coman está en duda para la final de mañana contra la Argentina. Sin embargo, el brote dentro del equipo no terminó y ayer Raphael Varane e Ibrahima Konaté también empezaron a manifestar síntomas. La delegación extremó los cuidados.
El MERS no tendría potencial pandémico, pero sí preocupa su alta letalidad