“Me hisoparon al ser contacto estrecho de un positivo porque comencé con fiebre. La PCR confirmó que tenía Covid. Eso fue el 18 de enero. El primer día, además de fiebre sentí mucho dolor de cabeza y cansancio. Desde el segundo día en adelante tuve tos y se sumó una congestión y dolor en las articulaciones. A la semana estaba bárbara -con algo de tos nada más- pero a partir del décimo día del positivo volvieron los dolores en las articulaciones y un dolor en las piernas acompañado de mucha debilidad”.
Así relató Agostina Bianco, periodista, locutora y operadora de una radio rosarina los avatares que le impuso el Covid que se contagió en esta tercera ola.
Aunque se incorporó al trabajo no se siente del todo bien y por eso ya tiene turno para un control médico presencial la semana que viene. “Me asusté con el dolor en las piernas, pensé en una trombosis, pero en una consulta que hice de manera virtual me explicaron que por las características del dolor, en ambas piernas, es algo muscular”, dijo Agostina a La Capital.
La situación que describe no es excepcional pero tampoco constituye una novedad, según los médicos consultados por este diario. El Covid, como otras virosis, implica un proceso que suele durar diez o quince días y también más. Una tos leve puede incluso perdurar por tres o cuatro semanas, lo mismo que el cansancio, sin que eso sea una señal de alarma.
Para hablar de Covid prolongado hay que pensar en meses de síntomas que no se van, como pasó con las variantes anteriores y también con la que predomina en este momento.
Y para pensar en que puede haber reinfecciones por Omicron habría que tener un considerable número de casos con PCR positiva, luego negativa y nuevamente positiva en los meses posteriores. Algo que por el momento no se midió en la Argentina. Por lo tanto, los síntomas que duran más de diez días, aún cuando van y vienen por un tiempo, estarían básicamente vinculados a la misma infección.
De hecho la recomendación oficial es que si alguien se contagió en los últimas semanas espere 90 días para vacunarse con tercera dosis ya que por ese tiempo “está protegido”.
Agostina, que tiene dos dosis de vacuna, es uno de los casi 50 mil rosarinos (registrados) que contrajeron la enfermedad en los últimos 20 días y todos ellos se infectaron con Ómicron.
Según la información que maneja el grupo de investigadores que hace seguimiento de variantes y que dirige la viróloga Adriana Giri (IBR/Conicet) -y que forma parte de Proyecto País- desde que comenzó el año esta mutación del Sars Cov 2 desplazó completamente a Delta en la ciudad y zona sur de la provincia.
“Me duele todo”
Federico Aguirre tiene 42 años, es ingeniero y uno de los que contó en la red social Twitter que tiene el alta epidemiológica desde hace diez días pero “me duele todo”.
En esa misma comunidad, la locutora Fernanda Rey dio a conocer su experiencia reciente con el Covid: “El jueves tengo el alta. Pensé que me iba a sentir bien ya, pero no. Tengo un decaimiento total y ganas de nada. Me arde la piel, dolor de garganta. No soporto el sol y el cuerpo…hacé de cuenta que me atropellaron”.
“Más de 20 días me llevó recuperarme”, expuso la licenciada en periodismo Mumi Yadanza. Y Julieta Bo agregó: “Hace diez días que me dieron el alta y me duelen mucho los talones, los gemelos”.
Ana Capelleti, médica de Doc 24, una empresa de telemedicina que recibe cientos de consultas diarias de pacientes con Covid, admitió que mucha gente está preocupada por síntomas que no se van en una semana o quince días.
Las malas experiencias de complicaciones severas y muertes, producidas en olas anteriores, dejaron su marca.
“Vemos mucha ansiedad en algunos pacientes y seguramente eso tiene que ver con distintos factores. La realidad es que con el Sars Cov 2 o con otros virus como los que producen la gripe o los resfríos no se puede decir que en estrictos cinco o siete días se te va a pasar todo. La tos leve, por ejemplo, es un síntoma residual que puede durar hasta cuatro semanas y eso es normal. El dolor de garganta tampoco se va enseguida”.
Alguien pude tener el alta epidemiológica, porque ya no contagia, y seguir con síntomas un tiempo más.
“La gente llama más de una vez, vuelve a consultar por esa tos que no desaparece en pocos días o por cansancio. Uno como médico intenta llevar tranquilidad y explicarles que el organismo no funciona como un reloj y que tengan paciencia, afortunadamente con las altas tasas de vacunación y las características de Ómicron la enorme mayoría de los casos son leves”, señaló la médica.
La fiebre suele durar entre 24 y 72 horas. “Un signo de alarma puede ser una fiebre que dura más de 10 días. Si tengo un paciente que en ese momento de la pandemia consulta por eso entonces indico placa de tórax como para descartar un proceso a nivel pulmonar, pero con esta variante casi todo lo que vemos es de vías aéreas superiores”, dijo Capelleti, quien en enero ya atendió a unos mil pacientes con Covid.
Otro punto que destacó la profesional es que puede haber, aun, cierta confusión respecto a la protección de las vacunas: “Hay que seguir insistiendo en que con dos dosis e incluso tres podés tener coronavirus y síntomas pero que justamente gracias a eso son llevaderos”, remarcó.
Vale destacar que las personas que hacen consultas vía telemedicina se ubican en la franja de los 18 a los 60 años.
Otra situación
El neumonólogo Octavio Fernández, médico del Sanatorio Parque y del Hospital Eva Perón, ofreció su mirada sobre los casos que están atendiendo actualmente. “El comportamiento de la enfermedad, en esta tercera ola, es de una severidad mucho menor que en las anteriores. La gran mayoría de los pacientes se manejan de manera ambulatoria y no requieren internación”, dijo.
El especialista agregó: “No vemos, ahora, compromiso pulmonar salvo excepciones”.
Fernández confirmó que la duración de los síntomas no es mayor a la que se dio desde el inicio de la pandemia con otras variantes. “El tiempo es similar, sobre en todo en síntomas que tienen que ver con el decaimiento, la cefalea y la tos que es residual y puede ser bastante rebelde. Pero insisto: esta vez son síntomas de vías aéreas superiores más que nada”.
“Se puede pensar en una recuperación total en unas cuatro semanas, y siempre hablando de una enfermedad muchísimo menos severa que la que observamos anteriormente”.
“Aunque Ómicron es dominante todavía pueden quedar algunos casos de contagio con Delta. Hay personas internadas, pocas pero hay, que se contagiaron hace semanas. En general esos son los casos un poco más severos que vemos, los que son producto de la variante anterior”, comentó el neumonólogo.
El profesional descartó que los síntomas que duran más allá de diez días sean Long Covid o Covid prolongado. “Para hablar de eso tienen que pasar meses sin que la persona se recupere”.