Expertos en infectología plantean medidas de prevención; por el alza de contagios a nivel global, la OMS declara la emergencia sanitaria; quiénes pueden ser los más perjudicados por el virus

Juana Copello

Mientras en la Argentina, en apenas ocho días, aumentaron 54% las infecciones de viruela del mono (ya suman 37 casos, todos en hombres de 36 años de edad promedio), la situación global de contagios llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar la emergencia internacional.

Para los expertos en infectología y vacunación, una de las alertas es que no queda claro cómo se transmite este virus que es endémico en África. Sin embargo, la letalidad es baja; cerca del 10%. Para prevenirlo, piden, entre otras medidas, evitar el contacto estrecho con casos positivos.

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La propagación de la viruela del mono en el mundo genera preocupación entre expertos, aunque no siempre es sencillo dimensionar la verdadera incidencia de la enfermedad ni la gravedad que reviste. Si bien no se trata de un virus nuevo, circulaba de forma endémica en algunas regiones, es la primera vez que se generan brotes de rápida extensión en países en los que no se registraba habitualmente.

Los especialistas piden mantener el nivel de alerta alto ya que, aunque hay una cantidad relativamente baja de casos y muertes, la situación epidemiológica puede cambiar de un momento a otro. En este contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia de salud pública internacional.

En la Argentina, en los últimos ocho días aumentaron 54% las infecciones por este virus. Ya son 37 los pacientes con esta variante de la viruela: 22 residen en la Ciudad de Buenos Aires; 8, en la provincia de Buenos Aires; 5, en Córdoba; 1, en Mendoza, y 1 en Santa Fe.

Para clarificar el alcance de la enfermedad y conocer desde síntomas hasta medidas de prevención, la nacion elaboró una guía con información clave para responder a las principales dudas.

1 ¿Cómo resurgió esta enfermedad y qué características tiene?

La viruela del mono es provocada por un virus perteneciente al género orthopoxvirus, al igual que la viruela humana. Se trata de una enfermedad zoonótica, es decir que puede transmitirse de animales a personas y luego entre personas.

Los primeros casos en humanos comenzaron a observarse en 1970 en la República Democrática del Congo y, a lo largo de los años, se han detectado brotes en distintos países de África central y occidental, donde suelen vivir los animales portadores. Siempre se mantuvo como una enfermedad endémica y en pocas ocasiones se han reportado casos fuera de ese continente.

El 15 de mayo de 2022 se informaron cuatro casos de viruela del mono en el Reino Unido y, con el correr de los días, se confirmó su aparición en más de 70 países, lo que genera preocupación entre expertos por su rápida propagación y por presentar cadenas de transmisión sin nexos epidemiológicos conocidos en Europa y América.

2 ¿Qué implica que la OMS haya declarado la emergencia internacional?

El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró al último brote de viruela símica como una emergencia de salud pública a nivel internacional y emitió pautas de cuidado temporales para enfrentarlo. La OMS considera que el riesgo global en casi todas las regiones es intermedio, con excepción de Europa, que es calificada como de alto riesgo. El organismo recomendó a las personas con mayor exposición reducir el número de parejas sexuales, ya que se observa que es la principal vía de contagio, aunque no la única.

Leda Guzzi, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), sostiene que, aunque el voto no haya sido unánime, es correcto que se haya declarado una emergencia internacional. “Permite generar un llamado de atención y a la acción a los gobiernos de los países. Esto también ocurrió luego de que en un mes se hayan cuadruplicado los casos en todo el mundo, lo cual no es menor”, indica. La infectóloga destaca que esta declaración quita las barreras burocráticas a la hora de aprobar nuevos tratamientos y vacunas que permitan el cese de la propagación del virus.

Florencia Bruggesser, miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE), explica: “Lo que alarma es que no queda bien claro cómo se está transmitiendo, ya que en los otros brotes se necesitaba de un contacto estrecho con el animal. En este caso, no lo estamos viendo, y tampoco observamos que haya un nexo epidemiológico con personas que tengan antecedentes de viaje”.

3 ¿Cuántos casos de viruela del mono hay en el mundo y en la Argentina?

La OMS informó que hasta la fecha hay contabilizados más de 23.000 casos en todo el mundo. Aunque ya había circulación en países africanos, la curva de contagios se aceleró a principios de mayo, cuando se empezó a propagar en países no endémicos. Actualmente Europa es la región con mayor circulación. Los diez países más afectados son España, Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Países Bajos, Canadá, Brasil, Portugal e Italia, que representan el 89,1% de los casos notificados a nivel mundial.

En la Argentina, hasta ayer se reportaron un total de 37 casos de viruela símica, de los cuales 22 se notificaron en la ciudad Autónoma de Buenos Aires, 8 en la provincia de Buenos Aires, 5 en Córdoba, 1 en Santa Fe y 1 en Mendoza. Todos los casos son de sexo masculino con un promedio de edad de 36 años.

4 ¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad?

Los síntomas de la viruela del mono suelen desarrollarse entre los 6 y los 13 días posteriores al contacto con un caso confirmado, aunque este período puede extenderse hasta 21 días. Los más frecuentes son fiebre, dolor de cabeza, muscular o de espalda, cansancio o inflamación de los ganglios. Este último es el síntoma más característico, que la diferencia de otras enfermedades que inicialmente pueden parecer similares como la viruela tradicional, el sarampión o la varicela.

Estas manifestaciones son sucedidas por una erupción en la piel, que se presenta en la cara para luego expandirse por distintas partes del cuerpo, principalmente en las palmas de las manos y las plantas de los pies. Posteriormente se forman costras que se caen al poco tiempo. Estas lesiones en la piel pueden ser planas o ligeramente elevadas, están llenas de un líquido claro y suelen producir picazón, molestia o dolor. También se pueden ver afectadas las mucosas orales, los genitales y las conjuntivas, así como la córnea de los ojos.

5 ¿Cómo se contagia? ¿Cuán contagiosa es?

“Se ha observado que es altamente contagiosa, pero no tiene el mismo nivel de contagiosidad que el coronavirus. Actualmente se está estudiando si se puede transmitir de forma presintomática o asintomática. De ser así, dificultaría la contención del brote”, afirma Guzzi.

La viruela símica puede transmitirse a las personas cuando entran en contacto con un animal infectado, que pueden ser roedores y primates. Entre humanos, se contagia a través del contacto físico, que puede incluir cara a cara, piel con piel, boca con boca, boca con piel y contacto sexual. Los especialistas también advierten que otras formas de transmisión se encuentran en las gotas respiratorias que emitimos en contacto cercano con otro.

La erupción de la piel suele ocurrir en los lugares por los que el virus ingresó y son especialmente infecciosos, como también lo son las lesiones en la boca.

6 ¿Hay medidas de prevención?

La principal recomendación del Ministerio de Salud de la Nación para prevenir el contagio es evitar el contacto cercano con personas que hayan confirmado tener la infección o presenten síntomas compatibles con la enfermedad. En esos casos, es importante además no compartir artículos como utensilios, sábanas o toallas. Si habitan un mismo espacio, se aconseja utilizar barbijo y mantener el distanciamiento.

El riesgo de contraer el virus a través de los animales puede reducirse evitando el contacto sin protección de la carne y/o sangre de animales salvajes.

7 ¿Qué gravedad reviste la enfermedad?

Los pacientes suelen desarrollar sus propias defensas para superar la infección, por lo que se la cataloga como una enfermedad autolimitada. Según la Organización Mundial de la Salud, a lo largo de los distintos brotes se han observa

do tasas de letalidad de entre 0% y 11%, aunque recientemente ha sido de entre 3% y 6%.

Los expertos advierten que, aunque la viruela símica se puede curar, hay que estar atentos a las complicaciones causadas por infecciones secundarias, que ocurren cuando las bacterias ingresan al organismo a través de las lesiones cutáneas. Entre ellas se destacan la bronconeumonía, la encefalitis, el síndrome séptico y la infección de la córnea, que puede generar la pérdida de la visión.

8 ¿afecta a algún grupo poblacional en especial?

Las personas propensas a desarrollar un cuadro más grave son las que presentan inmunodeficiencia, las mujeres embarazadas y los niños pequeños, que tienen un sistema inmunológico más inmaduro.

La OMS advierte además que los menores de 50 años pueden ser más susceptibles a contraer la enfermedad debido a la finalización de las campañas de vacunación contra la viruela humana, que también protege contra este virus.

9 ¿Hay vacunas? ¿Qué países las aplican?

Estudios de observación demostraron que la vacunación contra la viruela humana tiene una eficacia de alrededor del 85% en la prevención de la viruela del mono. Por lo tanto, quienes se encuentren vacunados pueden desarrollar una enfermedad más leve. Sin embargo, luego de la erradicación de la enfermedad, en 1979, finalizaron las campañas de inmunización y la vacuna utilizada en aquel momento no se encuentra disponible.

Actualmente hay dos vacunas aprobadas en Estados Unidos, que no se encuentran en la Argentina: la primera es Jynneos (también conocida como Imvanex), indicada para la prevención de la viruela humana en adultos de 18 años y en mayores con alto riesgo de contraer estas infecciones. Con una tecnología de virus atenuado, es también efectiva contra la viruela del mono y podría ser aplicada a poblaciones con inmunocompromiso. Las investigaciones publicadas muestran que es capaz de evitar el desarrollo de la enfermedad si es administrada en los cuatro primeros días tras la exposición al virus, mientras logra que los síntomas sean leves si se suministra entre luego del cuarto día. La segunda vacuna autorizada es ACAM2000, que fue producida ante un eventual ataque biológico y no puede utilizarse en personas inmunodeprimidas.

La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) autorizó la extensión de esta vacuna para su uso en la prevención de la viruela del mono. Países Bajos ya comenzó a aplicarla y otros países como Reino Unido y España evalúan ofrecerla a los trabajadores de la salud como una medida preventiva previa a la exposición al virus. Sin embargo, desde la OMS advierten que por el momento no se recomienda una vacunación masiva y que es necesario que también se tomen medidas de prevención.

10 ¿Tiene algún tratamiento especial?

No existen aún tratamientos comprobados. La Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) autorizó el uso de un antivírico originalmente desarrollado para la viruela, pero todavía no está ampliamente disponible sino que se prescribe solo en un contexto de investigación clínica.

Los tratamientos que existen son aquellos usados para aliviar los síntomas: se recomienda no rascarse las lesiones, lavarse las manos antes y después de tocarse las ampollas, mantener la erupción seca, descubierta y limpia con agua esterilizada, enjuagar las lesiones bucales con agua salada y tomar paracetamol si persiste el dolor. Los organismos de salud indican que los pacientes deben aislarse en sus casas y notificar al médico de forma inmediata. 

Fuentes:

Organización Mundial de la Salud; Ministerio de Salud de la Nación; Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología; Sociedad Argentina de Infectología; Leda Guzzi, médica infectóloga (M.N. 108.630) en el Hospital Maternidad de Vicente López y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI); Florencia Bruggesser, médica infectóloga (M.N. 114088), miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE).