En varios países, la pandemia siguió una fase regular de duración del aumento de casos; los científicos sopesan dos posibles respuestas

David Leonhardt 

THE NEW YORK TIMES

NUEVA YORK.– ¿Llegó a su pico la nueva ola de casos en Estados Unidos impulsada por la variante delta?

El número de nuevos casos diarios aumentó menos durante la última semana que en cualquier otro momento desde junio. Obviamente, no hay ninguna garantía de que esa tendencia continúe. Pero hay un gran motivo para pensar que puede y que el número de casos puede incluso disminuir en el corto plazo.

Desde que empezó la pandemia, el virus a menudo siguió un ciclo regular, aunque un poco misterioso. En un país tras otro, y en regiones dentro de los países, el número de casos nuevos aumentó durante aproximadamente dos meses antes de volver a disminuir. La variante delta, a pesar de ser considerada más contagiosa, también siguió este patrón.

Después de que delta se afianzara el invierno boreal pasado en la India, el número de casos aumentó considerablemente durante un poco más de dos meses antes de caer en picada a un ritmo casi idéntico. En Gran Bretaña, el número de casos aumentó durante casi exactamente dos meses antes de alcanzar su punto máximo en julio. En Indonesia, Tailandia, Francia, España y varios otros países, el aumento de delta también duró entre 1,5 y 2,5 meses.

Y en los estados norteamericanos en los que el subtipo provocó por primera vez un aumento en el número de casos, el ciclo ya parece estar a la baja. Los contagios en Arkansas, Florida, Louisiana, Mississippi y Missouri alcanzaron su punto máximo a principios o mediados de agosto y desde entonces disminuyeron.

Les preguntamos a los expertos sobre los ciclos de dos meses del coronavirus y reconocieron que no pueden explicarlo. “Todavía estamos realmente en la edad de las cavernas en términos de comprensión de cómo surgen los virus, cómo se propagan, cómo comienzan y se detienen, por qué hacen lo que hacen”, dijo Michael Osterholm, investigador de salud pública de la Universidad de Minnesota.

Pero dos amplias categorías de razones parecen plausibles, según los expertos.

Una involucra al virus en sí. En lugar de extenderse hasta llegar a la última persona, tal vez se propague en oleadas que sigan una línea de tiempo similar. ¿Por qué? Algunas personas pueden ser especialmente susceptibles a una variante como la delta, y una vez que muchas han estado expuestas, el virus comienza a retroceder, hasta que una nueva variante hace que el ciclo comience de nuevo (o hasta que una población se acerque a la inmunidad de rebaño).

La conducta humana

La segunda explicación plausible tiene que ver con el comportamiento humano. La gente no circula al azar por el mundo. Viven sus vidas en grupos sociales, señala Jennifer Nuzzo, epidemióloga de Johns hopkins. Quizás el tamaño típico de esos grupos significa que una ola de virus necesita alrededor de dos meses para alcanzar su punto máximo, y una nueva ola comienza cuando las personas salen de sus grupos, como durante las vacaciones.

Las personas también pueden seguir ciclos de tomar más o menos precauciones contra el coronavirus, y tal vez estos ciclos duran con frecuencia un par de meses.

Cualquiera que sea la razón, el ciclo de dos meses existe desde antes de la variante delta. Se repitió varias veces en Estados Unidos, tanto el año pasado como a principios de este año, con la variante alfa, que se centró en la parte superior del Medio Oeste.

¿Ahora qué?

Queremos enfatizar que no hay garantía de que los casos disminuyan en Estados Unidos en las próximas semanas. hubo muchas excepciones al ciclo de dos meses en todo el mundo. En Brasil, los casos reportados no han seguido un patrón claro. En Gran Bretaña, los casos disminuyeron unos dos meses después del pico por la variante delta, pero solo durante un par de semanas. Desde principios de agosto, los casos volvieron a aumentar, y es probable que el final de muchas restricciones de comportamiento influya.

En Estados Unidos, el comienzo del año escolar podría desencadenar brotes de manera similar y provocar un aumento en el número de contagios este mes. habrá que esperar unas semanas más para saberlo. Mientras tanto, una estrategia sigue siendo más eficaz que cualquier otra: “Vacunar, vacunar, vacunar”, como dice Osterholm.

La vacuna es poderosa porque disminuye a niveles mínimos las muertes y las internaciones, incluso durante los aumentos repentinos de contagios. En Gran Bretaña, el recuento reciente de muertes ha sido menos de una décima parte de lo que era en enero.

En algunos países, las tasas de vacunación aparentemente aumentaron lo suficiente como para romper el ciclo habitual de dos meses de Covid-19.

Evidentemente, el virus no puede encontrar suficientes personas nuevas para infectar. Tanto en Malta como en Singapur, el aumento repentino de este verano boreal duró solo unas dos semanas antes de disminuir.