La producción vacuna se mete de lleno en la era digital. El concepto de trazabilidad ampliada entusiasma al sector ganadero

El mundo agtech invade la ganadería. La transformación del sector estimula la aparición de una nueva camada de startup, que a su vez aceleran el ingreso de la producción vacuna a la nueva era digital. Un mundo de big data y blockchain que contribuye a mejorar el manejo y a responder a las nuevas exigencias de certificación por parte de los mercados globales.

En el primer congreso federal de ganadería organizado por el Rosgan se mostraron cuatro startup vinculadas al semillero de la Bolsa de Rosario. De unas 45 desarrolladas bajo ese paraguas, diez tienen que ver con la ganadería, explicó Diego Viruega, director de Tecnología e Innovación de la Bolsa de Comercio de Rosario y moderador del panel.

Cuidar la fábrica: el desafío de las razas ganaderas 

La trazabilidad, fue el punto de inicio de “Carnes validadas”, la primera vertical creada por el emprendedor Diego Heinrich. En 2019 comenzó a trabajar con el concepto de “trazabilidad ampliada”, que salta del uso de marcadores a recopilar y procesar información relacionada con genética y peso, a perfilar historias productivas y procesar y auditar información requerida, por ejemplo, por mercados de nicho.

La clave del cambio, explicó Heinrich, es el blockchain, el sistema de archivo digital que permite tokenizar, trazar, mostrar y transferir a través de activos NFT. “La cantidad de información asociada a la trazabilidad de la cadena de suministro permite asociarse a un token y crear activos digitales y desarrollar finanzas y seguros digitales”, dijo.

La digitalización financiera es uno de los vectores de la trazabilidad ampliada. El otro es la necesidad de responder a exigencias de los mercados internacionales en materia ambiental, climática, calidad específica o de bienestar animal. Por caso, permiten garantizar la producción libre de deforestación o medir la huella de carbono.

La certificación es el gran punto de llegada de la revolución digital ganadera. Pero lo que sostiene esa estrategia es la mayor y mejor producción. De ahí a la eficiencia y el aporte de la tecnología. Julián Torres es fundador de Kelpie, una start up que nació hace cuatro años y medio para responder a una pregunta de mucha complejidad: cuánto pasto hay y a qué ritmo está creciendo. “En base a la recolección de millones de puntos georreferenciados a partir del trabajo de campo, desarrollamos un algoritmo que le dice al productor cuánto pasto tiene y a qué tasa está creciendo”, señaló.

Internet de las cosas tiende el puente del mundo virtual al material. Allí se posiciona Basto, la start up que dirige Martín Toso, quien desarrolla dispositivos de caravanas inteligentes que permiten tomar y ver datos en tiempo real. La herramienta, que surgió del trabajo con productores regenerativos, permite realizar conteo real de animales, lote por lote, con información sobre confort o disconfort calórico, realizar mapas sobre dinámicas de pastoreo, etcétera.

Desde la manga, Digirodeo. registra, procesa y traza datos ganaderos por vía digital, “sin errores”. Nicolás Reyes contó que la startup combina dispositivos de Internet de las Cosas (caravanas digitales, jeringas inteligentes y balanzas electrónicas) con plataformas que ofrecen la posibilidad de hacer otra capa de análisis, con tablero de control, inteligencia artificial e integración con plataformas.