En las escuelas porteñas se usa barbijo a partir de 4º grado

En la recta final para el inicio de las clases, la mayoría de las provincias anunciaron los protocolos escolares. Cada jurisdicción tiene la libertad de “adecuar a su contexto local específico” los lineamientos del protocolo nacional Aula Segura. De las 23 provincias y la ciudad de Buenos Aires, la mayor parte manifestó la adhesión sin cambios a la propuesta del gobierno. Los puntos más controvertidos son el uso del barbijo y el pase sanitario.

El Ministerio de Salud aconseja el uso de tapabocas desde 1er grado de primaria, pero la ciudad de Buenos Aires lo estableció a partir de 4º grado (inclusive) y Jujuy, de 3er grado (inclusive).

Santa Cruz modificó lo sugerido por la Nación y es la única provincia que incluyó el uso del barbijo en todos los niveles. Además, todos los estudiantes deberán tener el esquema de vacunación iniciado para asistir a clases.

En sintonía con el protocolo nacional, Eduardo López, médico infectólogo y jefe del Departamento de Medicina del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, sostuvo: “Propondría el uso del barbijo desde primer grado. Un chico de seis contagia igual que uno de nueve”.

Más cerca de las decisiones tomadas por los gobiernos porteño y jujeño, Roberto Debbag, presidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica, se inclinó por alentar el uso del tapabocas en edades más avanzadas.

“La utilización en mayores de ocho años es una buena recomendación dentro del aula. Afuera debería ser más flexible”, explicó el especialista, y advirtió: “La barrera más importante es el barbijo. Hay que usar barbijos adecuados, no caseros. La propuesta de la provincia de Buenos Aires de usar los de tres telas, los quirúrgicos, es muy adecuada”.

Uno de los rasgos distintivos en la provincia de Buenos Aires es el suministro gratuito de tapabocas escolares en las instituciones públicas. Córdoba proveerá barbijos tricapa a estudiantes en contextos de vulnerabilidad social.

Pese a la importancia de esta barrera para evitar contagios, ambos infectólogos consultados por la nacion consideraron que habría que estar alertas al uso de tapabocas en edades tempranas, ya que podría ser perjudicial para el aprendizaje de los niños. “El chico con barbijo tal vez no puede repetir letras, por ejemplo. Si retrasa mucho el aprendizaje se puede analizar, pero recomiendo el uso desde primer grado”, planteó López.

En este sentido, el uso del tapabocas podría ser perjudicial para el desarrollo escolar en las primeras etapas de alfabetización. “En edades en las que la alfabetización está en proceso y la ruta fonológica está desarrollándose –en situaciones de escritura– resulta fundamental distinguir con claridad los fonemas (sonidos) para poder identificar correctamente aquellos grafemas (letras) que les corresponden. En mi experiencia en las escuelas, muchas ocasiones fue necesario bajar el tapabocas y –manteniendo una distancia prudencial– volver a repetir lo dicho mostrando los movimientos de la boca”, detalló Silvina Sartori, licenciada y profesora en Psicopedagogía para los colegios porteños St. Patrick’s y St. Matthew’s.

En la gran mayoría de las provincias se establecen excepciones para alumnos con discapacidades auditivas o dificultades en el lenguaje y estudiantes con trastornos sensoriales. En el primer caso, si las dificultades “impactan en el aprendizaje, se posibilita el uso de máscaras –sin barbijos– para todos los estudiantes y docentes que se encuentran en el aula para facilitar la lectura labio/facial y así complementar la comunicación y la presentación del modelo articulatorio”. Para alumnos con trastornos sensoriales, “se evaluará la implementación de un ajuste razonable”.

Rechazo

Muchas agrupaciones se movilizaron en contra del uso obligatorio de barbijo a edades tan tempranas en ámbitos escolares. María Laura Centurión, presidenta de la fundación Pensar Santa Cruz, dijo: “Debería ser de uso optativo hasta 3er grado. Además, debería tenerse en cuenta la situación epidemiológica de la provincia, y si se dieran las condiciones, que esto se flexibilice”.

El uso de tapabocas es obligatorio en el exterior y en las clases de educación física. “Estamos en contra del uso de barbijo en espacios abiertos y en las clases de educación física”, agregó Centurión.

“En menores de 3 años no está recomendado el barbijo. Podría ser riesgoso, por ejemplo, no ver si el chico traga algún objeto y que le cause algún problema. Son precauciones que van más allá de lo infectológico”, explicó Gabriela Tapponnier, infectóloga pediatra y secretaria del Comité de Infectología de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP).

Desde la asociación Padres Organizados (PO) señalaron a la nacion que siguen preocupados por la obligatoriedad del uso de barbijo, especialmente en primaria: “Cuál es la evidencia científica que justifica seguir sosteniendo esta medida sobre una población que no representa un riesgo frente al Covid”.

Aunque la mayoría de los países mantienen el uso de tapabocas en espacios cerrados en escuelas, algunos países han flexibilizado la norma. Dinamarca anunció el 1º de febrero que levantaría todas las restricciones sanitarias. El Reino Unido adoptó medidas parecidas: en Inglaterra los tapabocas son sugeridos, pero no obligatorios. En Escocia, a partir del 28 de febrero no será obligatorio para ningún alumno.

Santa Cruz fue la única que implementó la obligatoriedad del pase sanitario para asistir a clases. Los alumnos que no cuenten con el esquema de vacunación iniciado se conectarán de manera virtual: “Aquellos estudiantes que no cuenten aún con el esquema de vacunación iniciado tendrán clases virtuales, aulas híbridas y/u otras estrategias pedagógicas alternativas”.

El 7 de febrero comenzó el ciclo lectivo en El Chaltén, Santa Cruz, donde se requirió que los alumnos estuvieran vacunados para ingresar en el establecimiento. El ciclo lectivo comenzó antes, ya que, por el clima, el receso de invierno es más largo. Según pudo saber la nacion, el primer día de clases no se quiso dejar entrar a los alumnos no vacunados. Ante la insistencia de padres y organizaciones no gubernamentales, los alumnos pudieron ingresar, pero se separó a alumnos no vacunados de vacunados en aulas distintas.